Un hospital sueco mantiene el sistema de calefacción y ventilación gracias a la termografía

En los hospitales, el control climático es de vital importancia para garantizar tanto la higiene como la comodidad para los pacientes y el personal. Por ese motivo, el personal técnico de un hospital sueco ha adquirido una cámara termográfica de FLIR para llevar a cabo la inspección y el mantenimiento del sistema HVAC (calefacción, ventilación y aire acondicionado). La cámara termográfica de FLIR es una herramienta ideal para esta aplicación, pero también puede utilizarse en otras áreas, como las inspecciones del aislamiento de edificios y de mantenimiento eléctrico. Ha demostrado con creces su utilidad, según la opinión de los técnicos de mantenimiento del hospital.

«La cámara nos proporciona la información adecuada y nos permite tomar decisiones bien fundamentadas con respecto al mantenimiento del sistema de HVAC y la solución de todo tipo de problemas de construcción», afirma uno de los técnicos del hospital. «La temperatura en el interior del hospital debe ser de 22 °C y el aire procedente de los conductos de ventilación debe estar a 18 °C. Hay termómetros instalados en determinados puntos del edificio que proporcionan información al sistema de HVCA automatizado que utilizamos. De esta manera, obtenemos información general. Pero si queremos información más específica acerca de los flujos de aire y la distribución de la temperatura de una habitación, utilizamos la cámara termográfica de FLIR».

«De vez en cuando, algún paciente se queja de que la habitación está a una temperatura demasiado alta o demasiado baja», añade. «Con la cámara termográfica podemos comprobar rápidamente si hay algo que no funciona en la habitación. Si no pasa nada en la habitación, podemos enseñarle al paciente en ese momento la pantalla de la cámara termográfica y la termografía en la que puede ver que la temperatura es totalmente normal. En el caso de encontrar algún fallo, la cámara termográfica de FLIR nos ayuda a localizar el problema mucho más rápidamente, lo que permite una pronta reparación».

Quirófano

Algunas estancias del hospital requieren de una supervisión incluso más detallada, como es el ejemplo más destacado: el quirófano. «Según el tipo de operación, se requiere una temperatura ambiente diferente. Por tanto, se necesita llevar a cabo un control exhaustivo de la circulación del aire para evitar la contaminación por agentes patógenos aéreos. En consecuencia, comprobamos de forma regular los sistemas de HVAC de los quirófanos y los supervisamos exhaustivamente con la cámara termográfica de FLIR».

Los fallos que en ocasiones encuentran los dos técnicos en el sistema de HVAC del hospital son radiadores atascados o conductos de ventilación bloqueados. «Pero podemos hacer muchas más cosas con la cámara, como inspeccionar cuadros de fusibles y componentes mecánicos del sistema de ventilación, comprobar que la derivación de calefacción del distrito está refrigerando el agua a la temperatura adecuada, e incluso supervisar las baterías de reserva del la sala del servidor».

Defectos de aislamiento

En un proyecto reciente llevado a cabo en las instalaciones, se renovaron grandes partes del edificio. Se utilizó la cámara termográfica de FLIR para comprobar que el aislamiento funcionaba como debía. «Las inspecciones que se realizaron con la cámara termográfica de FLIR mostraron que existían fugas de calor en las juntas de las ventanas y que no había suficiente aislamiento en el tejado del ático. Además, también salió a la luz que algunos de los radiadores no se habían instalado correctamente. Según la información obtenida en las inspecciones termográficas, se corrigieron estos fallos, asegurándose así que las nuevas partes renovadas del edificio contaban con un buen aislamiento».

La termografía en comparación con los pirómetros puntuales

De acuerdo con los técnicos del hospital, la cámara ha resultado ser una estupenda incorporación a las herramientas con las que ya contaban. «Antes de contar con esta cámara termográfica, teníamos que basar las inspecciones de mantenimiento en mediciones por contacto». «Teníamos que tocar los componentes calientes a mano o utilizar un pirómetro puntual. Según nuestra experiencia, ninguno de estos métodos es tan rápido, eficaz y preciso como la cámara termográfica».

Las cámaras termográficas cuentan con importantes ventajas en comparación con los pirómetros puntuales. «El medidor puntual solo proporciona el valor de un área pequeña. Su utilización para inspecciones conlleva mucho trabajo y no se obtiene la visión general que proporciona una cámara termográfica. En una termografía se puede analizar inmediatamente todo el área para buscar puntos térmicos calientes o fríos y ver de un solo vistazo dónde se encuentra el problema».

Los detalles pueden variar, pero un pirómetro puntual es básicamente igual que tener una cámara termográfica con un solo píxel, ya que solo te permite conocer la temperatura de un solo punto. Una cámara termográfica de FLIR ofrecen lecturas de temperatura igualmente precisas pero la diferencia es que no solo proporcionan una, sino miles de lecturas de temperatura al mismo tiempo. Con un pirómetro puntual es muy fácil pasar por alto información de importancia fundamental. «Con el pirómetro puntual se obtiene un número. La cámara termográfica presenta la imagen de toda un área. La diferencia es enorme. Se puede ver de forma inmediata la distribución de la temperatura en toda un área y localizar rápidamente los problemas que, sin la cámara termográfica, no podrían detectarse».

Herramienta versátil

La primera vez que vieron una cámara termográfica en acción, supieron al instante que tenían que hacerse con una para ellos. «Todo empezó cuando contratamos los servicios de un asesor externo para el mantenimiento eléctrico que utilizaba una cámara termográfica de FLIR. Nos dimos cuenta inmediatamente de que se trataba de una herramienta versátil que se podía utilizar para multitud de aplicaciones diferentes en el hospital, así que le compramos una cámara termográfica FLIR BCAM al distribuidor local».

Actualmente, la cámara termográfica FLIR BCAM ya no se comercializa. La versión moderna es la cámara termográfica de la serie Ebx de FLIR. Los modelos de la serie Ebx de FLIR cuenta con una calidad de imagen de hasta 320 x 240 píxeles e incluyen las funciones que necesita para tomar decisiones que afectan al edificio bien fundamentadas, como decisiones con respecto al aislamiento integrado o las alarmas de punto de rocío. Las cámaras están especialmente diseñadas para las inspecciones en edificios, como la detección de problemas de calefacción y refrigeración en sistemas de HVAC, los flujos de aire, la detección de humedad, los problemas de aislamiento y otros problemas en edificios relacionados con la temperatura.