Cuatro razones por las que los administradores de seguridad deberían implementar soluciones contra UAS

La industria de los sistemas de aeronaves no tripuladas (UAS) es el sector de crecimiento más dinámico de la industria aeroespacial mundial. Desde el primer uso operativo de UAS armados en los Estados Unidos en 2001, los rápidos avances en las tecnologías subyacentes necesarias para fabricar drones han permitido que estos dispositivos proliferen. Hoy en día, los drones son ampliamente implementados tanto por clientes militares como comerciales, lo que hace que el mercado aumente de 4,4 mil millones de USD en 2018 a un estimado de 63,6 mil millones de USD para 2025.

Para los administradores de seguridad, los drones representan una amenaza completamente nueva, ya que la tecnología utilizada en una aplicación para el mantenimiento de la infraestructura se puede reacondicionar fácilmente para debilitar cualquier tipo de operación de las instalaciones en otra. Esta es la razón por la que los dispositivos Counter UAS (C-UAS) se han convertido en una parte cada vez más esencial de una solución de seguridad de extremo a extremo. Diseñados para detectar, identificar, ubicar, rastrear y mitigar amenazas terrestres y aéreas, los sistemas de detección de intrusiones perimetrales (PIDS) de C-UAS superponen sensores térmicos y dispositivos de radar líderes en la industria para brindar seguridad sólida en todo momento. Capacidades para instalaciones de todo tipo, en cualquier condición climática.

A continuación se presentan cuatro razones por las que los gerentes de seguridad deberían invertir en las soluciones Teledyne FLIR C-UAS.

1: Detección preprogramada

Las soluciones FLIR C-UAS están optimizadas para detectar cualquier tipo de intrusión en todas las condiciones climáticas, de día o de noche, y brindan rangos de detección y rendimiento más amplios en comparación con otras soluciones. Como parte de la solución C-UAS de FLIR, los radares de detección de drones de largo alcance, como el Ranger R20SS-3D o el R8SS-3D, están diseñados para rastrear múltiples objetivos simultáneamente, monitorizar áreas de cobertura predeterminadas varias veces por segundo y funcionar en todo momento con el fin de proteger los perímetros de amenazas terrestres y aéreas.

Debido a que operan en la banda X, es decir, un tipo de onda de radar que se encuentra entre 8,0 GHz y 12 GHz, los radares de detección de drones de largo alcance de FLIR se ven mínimamente afectados por las precipitaciones o el clima adverso. Pueden detectar todo, desde drones preprogramados o personalizados hasta paracaídas, globos de Mylar y aviones pequeños. Cuando se integran con otros dispositivos, como los sensores térmicos líderes en la industria, estos sistemas reducen los costes de infraestructura con un mantenimiento muy bajo y sin tarifas recurrentes, lo que mejora el ROI del sistema.

Si un dron enemigo se acercara al perímetro de una instalación en la oscuridad de la noche, incluso si hubiera una tormenta o una densa niebla, un radar de detección de largo alcance de FLIR aún podría detectar la presencia del dron y continuar geolocalizando la posición del dron, a medida que se acerca al perímetro, enviando alertas constantes y en tiempo real al personal de seguridad.

2: Identificación multisensor

Los radares FLIR Ranger se diseñaron para integrarse con sistemas multisensor de giro, inclinación y zoom (PTZ), como el Ranger HDC MS, estableciendo múltiples capas de detección y verificación para brindar una sólida protección perimetral. Al combinar sensores térmicos y visibles con radar, por ejemplo, EO/IR puede verificar cualquier alerta de detección de intrusión de un radar y confirmar visualmente dónde y qué es un objetivo, utilizando clasificación de vídeo avanzada y análisis de seguimiento. Esto no solo reduce el coste de las falsas alarmas, sino que también ofrece al personal de seguridad y a los servicios de emergencia datos detallados de detección de intrusos. Cuando se trata de intrusión perimetral y prevención de delitos, cuanto más conocimiento de la situación, mejor.

Por ejemplo, digamos que un radar FLIR de largo alcance detectaría un dron entrante y proporcionaría datos de geolocalización a las cámaras PTZ emparejadas y al equipo de operaciones de seguridad. A la orden, el PTZ multisensor se desplazaría hacia la amenaza localizada, para identificar y confirmar que se trata de un dron enemigo, entregando datos procesables para que los servicios de emergencia los utilicen en su respuesta.

Además, se pueden integrar sistemas de RF de terceros complementarios con la solución, para ofrecer una capa adicional de detección y clasificación con el respaldo del radar para detectar drones preprogramados y personalizados que son “invisibles” para estos sistemas.

3: Seguimiento dinámico

Los sistemas FLIR también están equipados con análisis de seguimiento, que se vuelven cada vez más importantes a medida que el dron vuela más cerca del perímetro. A larga distancia, la ubicación del dron se puede enviar desde el radar a la cámara para mantener la confirmación visual de la amenaza. A medida que el dron se acerca, se vuelve cada vez más importante que el bucle de retroalimentación de seguimiento responda en gran medida a los cambios en la ruta de vuelo, por lo que el seguimiento basado en la imagen es un método más preciso. Esta función de seguimiento automático permite a los operadores de seguridad concentrarse en coordinar la respuesta a la amenaza de un dron, en lugar de preocuparse por mantener la cámara apuntando al dron.

4: Mitigación perfecta

FLIR se asocia con varias herramientas de efector de terceros que están diseñadas específicamente para bloquear e interceptar drones enemigos entrantes. La interferencia interrumpirá la radiofrecuencia (RF) y los enlaces de comunicación satelital, como GPS, GLONASS, etc., haciendo que los drones enemigos no funcionen, mientras que las tecnologías de suplantación de identidad pueden tomar el control de los sistemas UAS enemigos al transmitir señales falsas de GPS al receptor de UAS. Los dispositivos de láser/microondas también se utilizan para dirigir los rayos de energía para dañar o destruir los fuselajes de los UAS.

A menudo, detectar, identificar y rastrear no es suficiente: los procedimientos de mitigación son necesarios para proteger los activos críticos. Estas estrategias multisensor C-UAS, que combinan sensores térmicos, radares terrestres y herramientas efectoras, no solo evitan que los drones enemigos traspasen el perímetro, sino que también aseguran que esos drones no podrán comunicar ninguno de sus propios datos en tiempo real a los operadores remotos. Cada paso a lo largo de la cadena de exterminio de C-UAS de FLIR es fundamental para optimizar el rendimiento de PIDS de extremo a extremo.

En última instancia, el personal de seguridad debe ser ágil, ya que las amenazas perimetrales ya no provienen exclusivamente del suelo. Proteger los activos de las amenazas aéreas, como los UAS, los drones y las aeronaves pequeñas, es simplemente imprescindible. La respuesta FLIR C-UAS, incluida la detección preprogramada, la identificación multisensor, el seguimiento dinámico y la mitigación fluida, garantiza que todos los perímetros estén seguros, frente a todo tipo de amenazas, en cualquier condición, en todo momento.